5. Arte Celta.

Continuamos avanzando, añadiendo un punto más de dificultad a nuestras tallas, que al tiempo ganarán en belleza y complejidad. Le toca el turno al arte celta.

5.1. Los motivos.

El rasgo más característico del diseño celta es el uso de cintas que se entrecruzan a modo de tejido. Éstas pueden ir desde un sencillo zig-zag a crear formas muy complicadas que rellenan las superficies y forman todo tipo de figuras, habitualmente animales.

Esta característica va a permitirnos realizar unas tallas muy vistosas con relativamente poco esfuerzo. Pero vayamos paso por paso. Lo primero va a ser el dibujo.

5.2. El trazado

Vamos a ilustrar la técnica de talla de motivos celtas con la realización de un cordón de dos cintas. Para ello vamos a ver los pasos a seguir en su dibujo:

Empezaremos por trazar dos series de circunferencias tangentes entre sí, separadas entre ellas por un radio. El resultado debería ser este:

Seguidamente haremos una nueva serie de circunferencias que serán concéntricas a cada una de las anteriores, siendo su radio la mitad. Obtendremos entonces un dibujo así:

En el siguiente paso, debemos unir con líneas rectas cada circunferencia interior con las exteriores tangentes a su concéntrica, teniendo en cuenta que esas líneas sólo deben tocar a cada circunferencia en un punto (tangentes exteriores). Quizás es más fácil verlo que describirlo. Sería como sigue:

Por último, debemos borrar las líneas sobrantes. Parece mentira que éste último dibujo haya salido simplemente borrando trocitos de líneas del anterior, pero así es, no se le ha añadido nada. El mejor consejo que os puedo dar en este punto es que penséis que la constante en el diseño celta es que cada cinta que pasa "por encima" de otra, en el siguiente cruce, pasará "por debajo". Siempre existe esta alternancia. Suerte y cuidado con los mareos.

5.3. Talla de un nudo celta.

Comencemos ahora a tallar ese bello cordón que acabamos de dibujar (bueno, quien dice "dibujar" dice "imprimirfotocopiarparaampliarycalcarsinelmenorpudor"). Después de haberlo llevado a la tabla, comenzaremos pasando la gubia de esquina por el exterior para obtener un pequeño fondo que nos permita darle el relieve necesario al motivo. No es necesario en este paso acercarnos a cada uno de los pliegues de la cinta. Mejor trazamos una linea recta tangente a todos ellos y la usamos como referencia para igualar el fondo. Seguidamente, con una gubia plana, cortaremos desde el borde marcado a lápiz como límite de la talla hasta la incisión anterior. Así conseguiremos marcar el fondo.

Cuando tengamos el fondo definido, podremos eliminar esos picos exteriores que hacen las cintas al cruzarse. Para ello haremos dos incisiones con una gubia plana, por fuera de la línea, sin apurar demasiado el corte, para evitar que nos rompa.

Quitaremos el trocito de madera y ahora sí, realizaremos el corte definitivo con la referencia de las líneas trazadas:

Después de realizar todos estos cortes tendremos algo así:

Para continuar, necesitaremos, aproximadamente, esta herramienta: gubia en "V" o de esquina, gubias planas de diferentes tamaños, con especial importancia de las pequeñas y alguna mediacaña suave:

Ahora empezaremos a vaciar los "huecos" que no corresponden al cordón. Siempre que podamos (en los huecos grandes) usaremos la gubia de esquina para hacer una incisión previa que nos facilite el trabajo. Donde no podamos, tendremos que utilizar directamente las gubias planas.

Una vez terminado el fondo, podemos iniciar la talla del cordón. Ésta es sin duda la fase más agradecida de este tipo de talla, ya que es muy fácil e inmediata y los resultados suelen ser muy gratificantes. Empezaremos pasando la gubia de esquina por la parte exterior de las líneas de cruce de las cintas, teniendo en cuenta que siempre deberemos respetar la cinta que va por encima en su totalidad, por lo que "comeremos" sobre la cinta que va "por debajo". Una vez hecho esto, con una gubia plana iremos creando la sensación de entretejido con una gubia plana adecuada, eliminando la madera necesaria de la cinta inferior en su encuentro con la superior.

Nuevamente es más fácil hacerlo que explicarlo, por lo que imagino que estas imágenes os ayudarán a comprender la mecánica. En la foto que sigue podéis ver el resultado final. Las marcas de lápiz que he hecho por encima de las cintas nos servirán de referencia para enriquecer todavía más esta bella figura.

El proceso consistirá únicamente en pasar un cañón pequeño (en este caso usé uno de 3 mm.) para hacer una canal a lo largo de todas las cintas. Limpiando finalmente los cortes con una gubia plana pequeña habremos finalizado el trabajo.

La talla celta da mucho más de sí. Os animo a conocerla y practicarla, pues los resultados son realmente vistosos. Como reto para continuar, os dejo este dibujo, consecuencia de dividir cada cinta del nudo de ejemplo en dos, multiplicándose de esta manera los cruces, aunque no la dificultad. Suerte a los valientes.

0. INDICE
1. INTRODUCCIÓN
2. CONSIDERACIONES PREVIAS
3. LA TALLA GEOMÉTRICA. ESTILO ROMÁNICO
4. TRISQUELES Y "COMAS"
5. ARTE CELTA

ANEXOS

 

 

1